Erandi, los albores de la rebelión panista
Mientras el “líder estatal” del PAN, Eduardo López, sigue viviendo su propio metaverso político, en el que mientras no haya procesos de elección abiertos ni convocatorias publicadas no pasa nada, este viernes aparece la postura pública del Senador de la República Erandi Bermúdez, en torno a sus aspiraciones para contender por la gubernatura del estado, descalificando incluso lo ya impuesto y enclavado en el imaginario colectivo de una militancia panista disciplinada: que será mujer.
Mediante declaraciones a la revista electrónica Quadratín, desde la hermana república de Michoacán, el senador lanza serios y contundentes argumentos en torno a por qué él debería ser el candidato de Acción Nacional a la gubernatura, de los cuales se puede leer entre líneas: porque no hay capacidad en las aspirantes, género y equidad no bastan; porque urge escuchar a la gente y el PAN ni a su militancia escucha; porque hemos sido rebasado por las desigualdades, la inseguridad y la violencia tolerándolas pasivamente; porque el sistema educativo no sirve como instrumento de progreso ya que es el germen de la problemática social, incluso lo ubica como el “primer gran problema a resolver”; que él ha sabido ganar elecciones sin el favor de los dedazos, llamados ahora designaciones, para que Luis Felipe Bravo no crea que nos dominan los términos priistas, como si cambiándole el nombre dejara de ser una perversión de la democracia.
Así expresados los fundamentos de Erandi Bermúdez, podemos decir que estamos en los umbrales de la rebelión de los contrarios al interior del PAN, estaríamos frente a lo que puede ser el detonante de la voz de las masas que comienzan a reclamar su derecho a la resistencia, a la imposición, al manipuleo del pensamiento dictado desde los intereses de quien todo lo controla en el partido y el gobierno.
Ciertamente que no replicamos la descalificación que Erandi hace de la capacidad de las mujeres para gobernar, pues de la trilogía propuesta tanto Alejandra Gutiérrez, Libia García y Alejandra “La güera” Reynoso han demostrado inteligencia y aunque alguna base su campaña en fotografías de caritas y sonrisas, en promoción de obras o banderas superficiales y efímeras, al menos la Güera Reynoso sí ha sabido enfrentar en parlamento y acción política el combate de las ideas, impulsar y defender iniciativas de modificación de la vida nacional, saber dar la batalla con su trabajo en comisiones y acción socio-política, lo que no refleja inconvenientes y él lo sabe pues ambos comparten escaños en el Senado.
Es cierto que en el ámbito partidista y gubernamental los dados se han cargado arbitraria e ilegalmente en favor de la candidatura para una mujer, y que a la fecha no se han definido tiempos, condiciones, criterios ni mecanismos para determinar el espectro de la convocatoria, lo que deja sin más fundamento ni criterio legal que la simple opinión personal y abuso de poder, siendo eso un atentado contra la democracia y el derecho de la militancia a determinar candidatos y campañas.
Ahora habrá que ver cómo se sacuden las descalificaciones de inoperancia y carencia de eficiencia los sistemas como el de educación, salud y seguridad, pues parece que la realidad avala lo dicho por el senador. Asimismo, habrá que esperar a que Lalo López salga de su jueguito virtual y vea el caos que amenaza a su partido, pues los aspirantes parece que comienzan a conspirar y pedir razones legales para quedar fuera de la candidatura o participar por ella.
Cuidado, que la rebelión de las masas militantes le puede dar un susto al partido, ya hay voces que reclaman que sea un hombre el candidato, otros como el alcalde capitalino, Alejandro Navarro, se llevan a su grupo de conspiradores a nadar a Cancún para organizar el despliegue de campañas y Jesús Oviedo sigue vigente desde la Secretaría de Gobierno. El CDE y su Consejo estatal deben recordar que la disciplina y el sometimiento institucional se debe aderezar con negociaciones eficientes y mediaciones oportunas.
