En plena efervescencia por las expresiones públicas de apoyo a la democracia y a su principal instrumento institucional el INE, hoy el pequeño dictador ha salido huyendo para encerrarse en su rancho denominado “La Chingada” y mandando al ejército servil a cargo del amurallamiento de palacio nacional.
Esta mañana las principales ciudades se han vestido de rosa para reclamar la derogación del Plan B del presidentito que quiere poner el gran aparato electoral en manos de Bartlet, para como aquel 1988 derrumbar el sistema cada que no les convenga y adueñarse absolutamente del poder y del voto ciudadano.
Hoy el grito unánime desde la plaza pública: ¡¡¡El INE no se toca, mi voto no se toca!!!¡¡¡Viva la democracia!!!